El mundo debería cerrar filas para preservar la paz en el hemisferio occidental. Es el llamamiento del canciller cubano, en referencia a las políticas belicistas del presidente de EE.UU., Donald Trump, que ha desplegado buques y aviones de guerra cerca de las costas venezolanas.
Condenó asimismo el reciente bombardeo estadounidense a una embarcación pesquera venezolana como pretexto de la lucha contra el narcotráfico. Para La Habana, tales acciones buscan reeditar la Doctrina Monroe de Washington en pleno siglo XXI.
El canciller en una rueda de prensa presentó la actualización del informe que Cuba remite cada año, en virtud de la resolución 79/7 de la Asamblea General de la ONU, sobre los efectos del bloqueo de EE.UU.
El canciller antillano denunció que el bloqueo ha provocado daños y perjuicios por siete mil 556 millones de dólares en el último año, lo que supone un incremento del 49 % respecto al período anterior. En más de seis décadas, los daños acumulados superan los 170 677 millones de dólares, cifra que, calculada a precios del oro, asciende a más de 2.1 billones de dólares.
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