“Si se lleva a cabo una acción contra el país, castigaremos a los agresores”, ha advertido este miércoles el coordinador adjunto del Ejército de Irán, el contralmirante Habibolá Sayari, destacando las capacidades del Ejército para contrarrestar las amenazas del enemigo.
Ha señalado que las Fuerzas Armadas de Irán cuentan con “personal fiel y comprometido con los valores de la República Islámica” y también “poseen el equipo necesario para defender el país”, pese a ser blanco de amplias sanciones desde la victoria de la Revolución Islámica (1979).
“Las Fuerzas Armadas han recibido la capacitación necesaria en condiciones difíciles y pueden responder al enemigo incluso en las peores circunstancias”, ha recalcado.
El alto mando castrense ha afirmado que el Ejército iraní está actualmente a la vanguardia de la ciencia y la tecnología. “Hoy se han logrado numerosos avances en las Fuerzas Terrestre, Aérea y Naval, así como en la Fuerza de Defensa Aérea, e innumerables sistemas, municiones y equipos se han incorporado a las unidades del Ejército”, ha agregado.
El contralmirante Sayari ha señalado además que el país ha desarrollado sus capacidades en diversos tipos de guerra, como la convencional, no convencional y moderna, incluida la guerra cognitiva. Asimismo, se han logrado grandes avances en los campos de drones, así como en la guerra electrónica y cibernética.
En su conclusión, afirmó que “el fortalecimiento del poder defensivo y disuasivo del país es una de las prioridades del Ejército para el Año Nuevo [iraní, que comenzará mañana, jueves]”.
Sus declaraciones se producen en un contexto en el que el nuevo presidente estadounidense, Donald Trump, ha intensificado la retórica bélica contra Irán debido a su programa nuclear pacífico y a lo que el magnate describe como la supuesta implicación del país persa en los ataques que Yemen lleva a cabo contra barcos vinculados a Israel en el mar Rojo en apoyo a Palestina.
La República Islámica, por su parte, ha minimizado las amenazas. Defiende el carácter pacífico de su programa nuclear y niega cualquier implicación en las operaciones llevadas a cabo por Yemen. Ante esta situación, Teherán ha dejado claro que no tolerará ninguna agresión contra su integridad territorial y ha prometido responder con firmeza.
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