Según ha comunicado la Fuerza la Real Fuerza Aérea británica (RAF, por sus siglas en inglés), varios cazas de combate Typhoon despegaron el viernes del aeródromo escoces de Lossiemouth para “controlar el vuelo que realizaban unos aviones de largo alcance rusos en el espacio aéreo internacional en el norte de Escocia”.
Durante la maniobra, según explica la Fuerza Aérea británica, los aviones rusos no entraron en ningún momento en el área de información de vuelo, situada al norte de la costa de Escocia, por lo cual “no fue necesario interceptarlos más que esto”.
Aunque el Reino Unido no dio a conocer la identidad de las aeronaves interceptadas, la Aviación de la Flota Rusa del Norte informó más tarde que tres de sus aviones de patrulla marítima y de guerra antisubmarina Tu-142 realizaron un vuelo planificado sobre aguas neutrales de los mares de Barents y de Noruega y la parte noreste del Atlántico.
La Fuerza Aérea rusa realiza vuelos regulares sobre las aguas neutrales del Ártico, el océano Atlántico, el mar Negro y el Pacífico, en conformidad estricta con las normas internacionales del uso del espacio aéreo, sin violar las fronteras de otros Estados, de acuerdo con el Ministerio de Defensa ruso.
Incidentes de este tipo son frecuentes, también cerca de las fronteras de Rusia, donde la Aviación rusa intercepta a menudo aviones militares y espías tanto de EE.UU. como de los países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Según opinan expertos militares, con esas acciones las partes del conflicto buscan evaluar las capacidades de reacción de su adversario.
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