Con este gesto (en vídeo), el partido centro derechista Ciudadanos, ha querido elegir un enfoque positivo hacia los intentos para formar el gobierno, después de las elecciones del 10 de noviembre.
Esto porque los sondeos muestran que ninguna formación podrá gobernar por sí sola, y el respaldo de Ciudadanos podría ser clave. Sin embargo, los gobernantes socialistas no ven el gesto con buenos ojos.
La idea de Albert Rivera también ha enojado a la formación derechista, el Partido Popular (PP).
En medio de esto, ha surgido un debate, en especial después de la reunión con prensa que tuvieron los expresidentes del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y del PP, Felipe González y Mariano Rajoy, respectivamente, quienes han dicho que, por el bien de España, hay que aceptar coaliciones incómodas, es decir, lograr un acuerdo entre los viejos rivales. Y este punto es sobre el que alertan ahora el izquierdista Podemos, y el ultraderechista Vox.
Además del tema de coaliciones, el debate sobre Cataluña es lo que rodea los actos de campaña de los partidos.
El PP y Ciudadanos insisten en derrocar al gobierno regional catalán de Quim Torra, mediante la imposición del artículo 155 de la Constitución, o con una moción de censura en el parlamento regional. Pero los socialistas y Podemos no lo ven necesario.
De tal modo que, de concretarse esa incómoda coalición, ese tema marcará la posible alianza.
akm/hnb
