“La Unión Europea reaccionará firme e inmediatamente contra las barreras injustificadas al comercio libre y justo, incluso cuando los aranceles se utilizan para desafiar políticas legales y no discriminatorias”, afirmó en una declaración a la prensa el portavoz de Comercio de la Comisión Europea, Olof Gill.
“La UE siempre protegerá a las empresas, los trabajadores y consumidores europeos de aranceles injustificados”, añadió.
En la primera reunión de gabinete de su segundo mandato, iniciado el 20 de enero, Trump dijo que “seamos honestos, la Unión Europea se formó para joder a Estados Unidos. Ese es el propósito y lo han hecho bien, pero ahora soy presidente”, recalcó.
Además, Gill defendió el trabajo realizado por el bloque comunitario para aupar el comercio de Estados Unidos. “Al crear un mercado único, grande e integrado, la UE ha facilitado el comercio, ha reducido los costes para los exportadores estadounidenses y ha armonizado las normas y reglamentos en 27 países”. Como resultado, indicó, “las inversiones estadounidenses en Europa son muy rentables”.
No obstante, el alto funcionario dejó claro que el consumidor y las empresas europeos constituyen una línea roja.
“Europa representa el diálogo, la apertura y la reciprocidad. Estamos dispuestos a asociarnos si respetamos las reglas. Pero también protegeremos a nuestros consumidores y empresas en todo momento. No esperen menos de nosotros”, concluyó.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ya había anunciado el 13 de febrero que impondría aranceles recíprocos en los próximos meses, lo que supondría que Estados Unidos adoptaría el mismo nivel de aranceles que sus socios comerciales.
En este sentido, anunció aranceles del 25 % sobre el acero y el aluminio extranjeros. La medida del mandatario de aumentar los impuestos a las importaciones de otros países provocó reacciones en Europa, en donde la imposición de aranceles podría tener un impacto negativo significativo en la industria y en otros ámbitos del bloque.
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