Según ha informado la Célula de Información de Seguridad del Gobierno iraquí, mediante un breve comunicado, al menos un cohete Katyusha ha impactado en las cercanías al aeropuerto de Bagdad, que alberga a un contingente de la llamada coalición anti-EIIL (Daesh, en árabe), liderada por Estados Unidos.
La fuente, además, ha explicado que el cohete fue lanzado por un grupo desconocido desde la región de Al-Furat, en los alrededores de Bagdad. El organismo descarta la existencia de víctimas mortales y daños materiales por este ataque.
Otras fuentes iraquíes, sin embargo, han cifrado en dos los cohetes lanzados que “alcanzaron casi con alta precisión” el complejo de las instalaciones militares del Ejército de EE.UU., conocido como Base de Victoria (Victory Base Complex, en inglés), ubicado en los alrededores del aeropuerto de Bagdad.
De momento ningún grupo se ha atribuido la responsabilidad de estos ataques, pero los grupos armados no identificados han atacado con frecuencia varios convoyes y bases de Estados Unidos en Irak, así como la zona donde se encuentra la embajada norteamericana en Bagdad.
Bagdad exige más que nunca la salida de tropas estadounidenses tras el brutal asesinato del comandante de la Fuerza Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, el teniente general Qasem Soleimani, y el subcomandante de las Unidades de Movilización Popular (Al-Hashad Al-Shabi, en árabe) de Irak, Abu Mahdi al-Muhandis, entre otros compañeros, en un ataque selectivo perpetrado el pasado 3 de enero por Washington en Bagdad.
Las autoridades iraquíes denuncian también que EE.UU. está involucrado en distintos actos desestabilizadores, incluidos el apoyo a los terroristas y ataques a las posiciones de las fuerzas populares iraquíes que luchan contra el terrorismo.
Las fuerzas populares iraquíes, por su parte, han dicho que harán frente a cualquier ataque de Washington y advierten que, de ahora en adelante, tratarán a las fuerzas estadounidenses como a “tropas de ocupación”.
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