El presidente de EE.UU., Donald Trump, emitió el martes varios indultos a favor de cuatro contratistas de la empresa militar estadounidense Blackwater, responsables del asesinato de 14 civiles en Irak, en 2007. Los contratistas indultados fueron condenados a penas que oscilan entre los 12 años y cadena perpetua, con cargos que incluyen el asesinato en primer grado.
En un comunicado emitido este miércoles, la Cancillería iraquí ha denunciado la medida, pues contradice el “compromiso” proclamado por EE.UU. con los derechos humanos, la justicia y el Estado de derecho, además de reflejar el hecho de que Washington no tiene en cuenta la “gravedad de los [referidos] crímenes cometidos”.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Irak ha destacado que la medida se ha producido ignorando la “dignidad de las víctimas, y los sentimientos y derechos de sus familiares”.
El Gobierno de Bagdad instará, mediante los canales diplomáticos, a Washington, a reconsiderar la citada decisión, se lee en el texto.
Los indultos, también censurados por las Naciones Unidas, han provocado la reacción del Movimiento de Resistencia Islámica de Irak (Kataeb Hezbolá), el cual ha tachado la medida de una “acción arbitraria injusta”, volviendo a enfatizar la necesidad de expulsar a las tropas estadounidenses del suelo iraquí.
En mayo de 2019, el diario estadounidense The New York Times reveló que Trump había pedido al Departamento de Justicia los expedientes de varios casos de crímenes de guerra de alto perfil, incluidos los de los contratistas de Blackwater, para decidir eventuales indultos.
Meses más tarde, el inquilino de la Casa Blanca restableció en el rango de suboficial jefe de Navy SEAL (acrónimo en inglés de los equipos Mar, Aire y Tierra de la Armada de EE.UU.) a Edward Gallagher, quien fue degradado en julio tras ser condenado por disparar a civiles desarmados y matar a un enemigo cautivo mientras se hallaba desplegado en Irak, por lo que fue arrestado en septiembre de 2018.
Anteriormente, el Comité de Seguridad y Defensa del Parlamento iraquí había anunciado que Blackwater —condenado por cometer crímenes de guerra y matar a civiles en la guerra que orquestó EE.UU. en Irak— había entrado con otro nombre en el país árabe para reactivar el grupo terrorista Daesh.
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