Durante un programa televisivo nacional y en respuesta al reciente informe de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) sobre las actividades nucleares de la República Islámica, el presidente de la Organización de Energía Atómica de Irán (OEAI), Mohamad Eslami, ha destacado que, desde Occidente, hay intentos para obstaculizar el cierre del caso relativo al programa nuclear pacífico del país persa.
“En el acuerdo nuclear, de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA o PIAC, por sus siglas en inglés), logramos un avance importante, y este es el décimo año del acuerdo: el año en que expira la Resolución 2231 del Consejo de Seguridad de la ONU, por ende, se cierra el caso nuclear iraní. Sin embargo, hay quienes no quieren que este asunto concluya y, por ello, están generando propaganda por todos los medios para evitar que lleguemos a esa fecha”, ha manifestado Eslami.
Al asegurar que Irán ha cumplido con sus obligaciones de salvaguardias y las contenidas en el Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP), ha subrayado que “los recientes informes de la AIEA han abandonado el enfoque técnico”.
Ha reiterado, en particular, que el enriquecimiento es “una línea roja” para Irán y “no hay alternativa al enriquecimiento”, explicitando que es esencial para la producción de medicamentos radiactivos y tecnología avanzada.
De acuerdo a las declaraciones del jefe nuclear iraní, los obstáculos se han incrementado desde el año pasado, incluso impidiendo el regreso de Antonio Grossi (director de la AIEA) a Viena y emitiendo resoluciones. “Su objetivo es evitar que Irán alcance los frutos de este décimo año”, ha subrayado.
En este sentido, Eslami ha aclarado que la AIEA ha presentado una imagen del programa nuclear iraní “contaminada con acusaciones que llevan 25 años repitiéndose”. Su presión, especialmente en este momento, tiene otra razón más clara: los crímenes de Israel en Gaza han resonado en el mundo, y Estados Unidos y los países europeos están apoyando a Israel. “Como no tienen ningún otro caso [internacional] en sus manos, están fabricando narrativas”, ha destacado.
También ha explicado que durante la visita de Grossi a Irán, mantuvieron interacciones y, según sus propias declaraciones, llevaba un mensaje para mejorar la situación. “Sin embargo, ni siquiera le permitieron regresar a Viena para que emitieran una resolución”, ha agregado.
“Todos los procesos y actividades de Irán han estado bajo supervisión de la AIEA, sin que exista ningún caso donde la Agencia no haya tenido acceso. Estas declaraciones absurdas provienen principalmente del régimen sionista, que busca crear narrativas falsas sin ningún fundamento legal”, ha destacado.
El sábado, la Cancillería y la Organización de Energía Atómica de Irán, en un comunicado conjunto, reaccionaron al informe del director general de la AIEA, considerando que fue redactado bajo “presiones políticas”.
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