Los mandatarios regionales elegidos el pasado 25 de octubre en todo el territorio colombiano se dieron con miras a los programas del posconflicto, esta decisión da a entender porque la coalición de los partidos de Gobierno sacaron la mejor parte.
Uno de los grandes derrotados fue el partido del expresidente Álvaro Uribe, los analistas creen que su discurso guerrerista los perjudicó.
La izquierda colombiana está casi nula en gobernabilidad en todo el territorio nacional, se cree que los medios de comunicación poderosos y sus recientes malos manejos políticos le pasaron factura.
En estas votaciones regionales los colombianos asistieron un poco más a las urnas, aunque la cifra de abstención todavía es bastante alta ésta descendió, alrededor del 7 %, marcando un registro total de un poco más del 41 %. Según la Registraduría General de la Nación.
Álvaro Altamiranda, Bogotá.
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