En una entrevista concedida el sábado a la cadena Telesur, Morales destacó que el pueblo boliviano “resiste con mucha valentía, con mucha fuerza y energía contra la dictadura”, añadiendo que le dolía mucho escuchar de la violencia y la represión ejercidas por el autoproclamado gobierno de Jeanine Áñez en el país sudamericano.
“El pueblo boliviano y el mundo entero saben que nosotros garantizamos la estabilidad política. Decían ‘dictadura de Evo’, ahora lo que está viviendo Bolivia eso se llama dictadura: Fuerza Armada y la Policía contra el pueblo, balas. El día de ayer más de 130 heridos a bala, ¿cómo se puede entender eso?”, expresó Morales.
Además, condenó la censura de la que son blanco los medios de comunicación y el hecho de que se ignore la libertad de expresión, en referencia a los comentarios pronunciados por la ministra de Comunicación de facto, Roxana Lizárraga, quien, conforme a Morales, dijo que los periodistas sediciosos, nacionales e internacionales van a ser sometidos y van a hacer cumplir la Constitución. “Es un gobierno de facto que viene a callar los medios de comunicación”, indicó el líder indígena.
En otra parte de sus declaraciones, Morales subrayó que lo que está pasando en Bolivia se asemeja a los procesos promovidos en diversos países de América Latina, los cuales buscan crear caos en pro de los intereses del Gobierno de Estados Unidos y del imperialismo.
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El pueblo boliviano y el mundo entero saben que nosotros garantizamos la estabilidad política. Decían ‘dictadura de Evo’, ahora lo que está viviendo Bolivia eso se llama dictadura: Fuerza Armada y la Policía contra el pueblo, balas. El día de ayer más de 130 heridos a bala, ¿cómo se puede entender eso?”, expresó el presidente dimisionario de Bolivia, Evo Morales.
“Lamentablemente, algunos países sometidos al imperio norteamericano destrozan los procesos de integración”, señaló al respecto, para luego enfatizar que todos los latinoamericanos tienen la responsabilidad de hacer todos los intentos posibles para lograr su liberación económica, programática o una liberación de carácter social.
En este contexto, Morales sostuvo que los bolivianos, como siempre han hecho, estarán compartiendo una resistencia contra las políticas económicas, “pero por ahora por la democracia, por la vida, mi querida Bolivia”, agregó.
Morales, el primer presidente indígena de Bolivia desde 2006, renunció al cargo el 10 de noviembre para “preservar la paz en su país” ante la arremetida golpista de la oposición, que provocó una ola de protestas contra las autoridades del Estado y funcionarios afines al MAS (Movimiento Al Socialismo), en el que milita Morales, negándose a reconocer su reelección en los comicios del pasado 20 de octubre.
Tras tales incidentes y la autoproclamación el martes de la exsenadora opositora Áñez, el país sudamericano ha sido escenario de movilizaciones a favor del dirigente indígena, que han sido reprimidas con violencia por la Policía y las Fuerzas Armadas, causando muchos muertos y heridos.
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