El incidente de violencia ha tenido lugar la mañana de este domingo cuando varios terroristas intentaron entrar en una comisaría de policía en la ciudad de Saravan, pero recibieron una contundente respuesta de las fuerzas iraníes.
Al menos un agente de policía, identificado como Jodadad Baqeri, padre de cuatro hijos, ha perdido la vida y otro agente ha resultado herida en los tiroteos.
El jefe de la Policía de Sistán y Baluchistán, el general de brigada Mohamad Reza Eshaqi, ha anunciado que sus fuerzas abatieron a tres bandidos armados, arrestaron a otros cuatro y confiscaron dos vehículos, así como un fusil Kalashnikov, una pistola, y una cantidad de municiones pertenecientes a los terroristas.
Ha asegurado que la Policía actuará con mano dura contra cualquier elemento que intente comprometer la seguridad del país. “La Policía se ha opuesto firmemente a los actos maliciosos de bandidos traidores y no escatimará esfuerzos para garantizar la seguridad de la población”, agrega.
Sistán y Baluchistán, que limita con Pakistán y Afganistán, ha sido durante mucho tiempo escenario de frecuentes enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad iraníes y terroristas, así como narcotraficantes. Las fuerzas iraníes han protegido la frontera y han logrado repeler casi todos los ataques de terroristas, apoyados desde el extranjero.
El grupo Yeish al-Adl, con sede en Pakistán, se ha atribuido la responsabilidad de varios atentados terroristas contra civiles y fuerzas de seguridad en los últimos años en Sistán y Baluchistán.
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