El general de brigada Ahmad Ali Goudarzi, comandante de la Policía fronteriza de Irán, dijo el viernes que sus fuerzas frustraron un intento de un grupúsculo terrorista para ingresar al país a través de la zona fronteriza de Sirkan, en la provincia suroriental de Sistán y Baluchistán.
“Este grupúsculo terrorista pretendía ingresar al país a través de la zona fronteriza anoche [el jueves] para llevar a cabo operaciones destructivas”, detalló.
El alto mando militar destacó la vigilancia de las guardias fronterizas iraníes y detalló que sus tropas “asestaron un duro golpe” a los terroristas, enfrentándose a los terroristas con “fuego pesado”.
Detalló que las guardias fronterizas de Irán abatieron a dos elementos extremistas y confiscaron una gran cantidad de armas y municiones de la célula terrorista, incluidos dos dispositivos inalámbricos portátiles, 21 cajas de cargadores, dos cargadores inalámbricos, una cámara infrarroja, un artefacto explosivo improvisado, dos baterías para artefactos explosivos y un teléfono inteligente.
Entre los artículos adicionales encontrados, agregó, se encontraban ropa, suministros de alimentos y un teléfono satelital.
Irán y Pakistán comparten una frontera de 900 kilómetros, ubicada en Sistán y Baluchistán. Las zonas montañosas de difícil acceso en esta provincia han sido utilizadas por algunos grupos terroristas como Yeish al-Adl, apoyados por algunos países hostiles, para intentar infiltrarse en el territorio iraní para cometer atentados.
Teherán ha urgido una y otra vez a Islamabad a actuar con dureza contra estas bandas terroristas, entre ellas Yeish al-Adl, autor de numerosos ataques terroristas en Sistán y Baluchistán.
En enero, Irán atacó con misiles y drones dos instalaciones utilizadas por Yeish al-Adl en la frontera con Pakistán, casi un mes después de que el grupo terrorista asesinara a 11 policías iraníes en un ataque a una comisaría de la policía llevado a cabo el 15 de diciembre en la ciudad de Rask, en Sistán y Baluchistán.
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