El barril del crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI), para su entrega en mayo, que este lunes se negociaba por último día, perdía más del 305 % de su valor de cotización y se situaba en -37,63 dólares. En 2011, valía 114 dólares.
Este precio es insólito en toda su serie histórica y va mucho más hondo que los 8 dólares mínimos alcanzados hasta ahora en 1973 en la Guerra del Yom Kipur. Además, la virulencia de la caída hace que el de este lunes sea el mayor descalabro de toda su historia en una sola sesión.
Este derrumbe se ha producido en un mercado devastado por una demanda en caída libre y reservas estadounidenses casi saturadas a causa de la crisis pandémica causada por el nuevo coronavirus, denominado SARS-CoV-2, que está haciendo un verdadero estrago entre la población estadounidense.
Mientras tanto, el futuro del WTI para entrega en junio se mueve ligeramente por debajo de los 22 dólares por barril, lo que implica un descuento de nada menos que del 98 % para los que quedarán liquidados en dos sesiones.
El desplome afectó a la Bolsa de Nueva York, que cotizaba en rojo: el Dow Jones cedía 1,04 % y el Nasdaq ganaba el 0,14 tras perder en la apertura.
Sin embargo, el barril de Brent del Mar del Norte, referencia para el mercado europeo y global, cedía 6,5 % hasta los 26,27 dólares el barril a las 13:30 GMT.
La impresionante diferencia entre los barriles de WTI y Brent, y también con los futuros de WTI, que se encuentran en 20 dólares para entrega en junio y 32 dólares en noviembre, se debe a la falta de espacio de almacenamiento que está sufriendo Estados Unidos para el petróleo sobrante ante el derrumbe del mercado que provocó la pandemia del coronavirus.
Esto ha llevado a que todos los inversores que no tengan los medios físicos para recibir los barriles de crudo el martes, ya sea por la falta de espacio de almacenamiento, el aumento de los costos de conseguirlo o por la sencilla razón de que se trata de especuladores comerciando futuros, están forzados a desprenderse de sus contratos al precio que sea, lo que ha llevado al derrumbe del WTI en su vencimiento de mayo.
Parece ser que ni el reciente acuerdo de la OPEP plus, liderada por Arabia Saudí, Rusia y otros productores del carburante, ha logrado evitar el desplome del precio del crudo en el mercado mundial. Aún con todo, los países esperan que este acuerdo devuelva el equilibrio al mercado petrolero.
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