A través de un comunicado publicado este martes, la Cartera estadounidense ha anunciado una lista adicional de los altos cargos sancionados del CGRI, incluyendo a su comandante en jefe, el general de división Mohamad Ali Yafari.
Además, ha dictado embargos contra varias personalidades y entidades persas que han mantenido vínculos con esta entidad militar persa, bloqueando así sus bienes en el territorio estadounidense.
El ente norteamericano ha indicado que las nuevas sanciones se han aplicado en función de la ley firmada por el presidente de EE.UU., Donald Trump, para contrarrestar a los ‘adversarios’ a través de sanciones, llamada CAATSA (en inglés) que, entre otras cosas, impone nuevas sanciones contra la República Islámica.
La sección 105 de esa normativa requiere la imposición de sanciones al CGRI y otras personas que sean parte de sus funcionarios, agentes o afiliados.
La misma Cartera estadounidense incluyó a mediados de este mes de octubre el nombre de esta fuerza armada de élite iraní en su lista negra bajo el pretexto de su programa de misiles y su apoyo a los Movimientos de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) y de El Líbano (Hezbolá), calificados de “terroristas” por EE.UU.
La medida fue adoptada después de que el mandatario estadounidense se negara a certificar el acatamiento de Irán del pacto nuclear entre Teherán y el Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania), conocido como el Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA, por sus siglas en inglés), y amenazara con hacer frente al “programa de misiles balísticos” iraní y sancionar más al CGRI.
El presidente iraní, Hasan Rohani, repudió la decisión de Washington y aseguró que el CGRI nunca cesará su lucha contra el terrorismo en la región.
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