El Departamento de Comercio de EE.UU., por medio de un comunicado publicado este martes, anunció que ha incluido en su “lista negra” a dichas entidades por “enviar los drones que Rusia usó para atacar a Ucrania”.
Las sancionadas son la empresa de Diseño y Fabricación de Motores de Aeronaves, la Fuerza Aeroespacial del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI), la Organización de Investigación y Autosuficiencia del CGRI, las empresas MADO y Paravar Pars, las compañías Qods Aviation Industries (QAI) y Shahed.
El informe reitera que los vehículos aéreos no tripulados producidos por las entidades iraníes están siendo transferidos a Rusia para su uso en Ucrania, una actividad que es contraria a los intereses de seguridad nacional y política exterior de EE.UU.
Las sanciones vienen después de que el 9 de diciembre, Estados Unidos alertara sobre una asociación militar “sin precedentes” entre Rusia e Irán, y acusara, sin pruebas, a Teherán de convertirse en uno de los principales patrocinadores militares de Moscú, enviando cientos de drones a Rusia para usarlos en la guerra con Ucrania.
La última tanda de restricciones que EE.UU. impuso contra Irán, bajo esas acusaciones, fue el pasado 6 de enero, cuando sancionó a siete individuos iraníes.
Teherán ha negado en diversas ocasiones el suministro de drones para ser utilizados en el conflicto de Ucrania y se ha ofrecido como mediador entre Kiev y Moscú, en la guerra en curso, desde finales de febrero pasado.
Irán ha pedido a las autoridades ucranianas pruebas sobre el uso de sus aparatos teledirigidos por Rusia, y asevera que las acusaciones son parte de una campaña política liderada por los medios de comunicación de ciertos países contra el país persa.
Dichas alegaciones se producen mientras la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), liderada por EE.UU., ha entregado diferentes tipos de armas a Kiev, incluido sistemas antidrones sofisticados.
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