Gritando: ¡esto es ilegal!, Julian Assange fue arrestado por la Policía en la embajada de Ecuador en Londres, la capital británica y ha perdido su condición de asilado político. Los rumores de su inminente expulsión de la embajada comenzaron la pasada semana con una publicación en Wikileaks que aseguraba que el Gobierno ecuatoriano había acordado con el Gobierno británico el arresto de Assange.
Las relaciones entre Julian Assange y el Gobierno de Ecuador cambiaron para peor con la llegada del presidente Lenín Moreno, quien impuso una serie de restricciones a las libertades que Assange disponía en la embajada.
La versión oficial es que Assange estaba incumpliendo estos requisitos como asilado pero la versión no oficial apunta a un intercambio de favores entre Estados Unidos y Ecuador.
Julian Assange fue llevado al tribunal de Westminster donde ha sido declarado culpable de romper la fianza que en 2010 un tribunal británico le impuso mientras se aclaraban cargos en su contra desde Suecia y EE.UU. Por temor a ser extraditado, rompió su fianza en 2012 y consiguió asilo político en la embajada de Ecuador en Londres. Su sentencia podría ser de 12 meses.
Si Assange será extraditado a Estados Unidos tendrá que enfrentarse a los delitos de hackeo y publicación de los secretos revelados por el exsoldado y exanalista de datos del Ejército estadounidense Chelsea Manning, en el año 2010 y es que tras pasar 7 años de calvario, recluido en la embajada americana en el Reino Unido, la batalla por la libertad de Julian Assange comienza ahora.
Ian Díez, Londres.
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