La primera ministra del Reino Unido, Theresa May, vuelve a apurar su último cartucho con el anuncio de volver a llevar al Parlamento su propuesta de Brexit a comienzos del mes de junio.
Se trata de la misma propuesta que ha sido ya tres veces rechazada, pero ofrece además ciertos compromisos, en la forma de 10 puntos, para convertir el rechazo en apoyo.
Otros puntos incluyen alternativas para el Seguro de Irlanda, la confirmación parlamentaria de cualquier acuerdo, garantías para los derechos de los trabajadores y el medioambientes, y la búsqueda de un acuerdo de comercio libre. Sin embargo, su recepción no podría haber sido peor.
Horas después de anunciar los diez puntos con los que Theresa May pretende unir al Parlamento, el rechazo en la Cámara es generalizado. Ni uno sólo de los miembros del Parlamento que votaron en contra durante la última propuesta han anunciado su intención de cambiar su voto y otros 25 parlamentarios que hasta el momento habían votado en favor de la primera ministra han anunciado que le han retirado su apoyo.
Esta división se observa de cara a las elecciones al Parlamento Europeo (PE), que en el Reino Unido se producen este jueves. En su intento de contentar a todas las posturas, May ha colocado a su partido en quinto lugar en las encuestas con pronósticos de perder su representación parlamentaria.
Por el contrario, quienes lideran las encuestas, el Partido del Brexit y los Liberales Demócratas, llevan como propuesta la salida total de Europa y la permanencia respectivamente. Si los pronósticos se cumplen, Theresa May podría tener los días contados.
Ian Díez, Londres.
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