El portavoz del Gobierno iraní, Ali Rabiei, ha enfatizado este martes que el encuentro de Viena (capital austriaca), donde se reunirán este martes los representantes de los signatarios del pacto nuclear —de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés)— en el marco de la Comisión Conjunta del convenio, representa un nuevo capítulo en el proceso de la eliminación de las medidas coercitivas.
“Tal y como predijimos en el apogeo del acoso y las presiones de la Administración [del expresidente de EE.UU. Donald] Trump, eventualmente, EE.UU., decepcionado por el camino equivocado al que acudió, admitirá que la máxima presión ha fracasado y que no hay más remedio que revivir el PIAC y hacer que todas las partes vuelvan a sus compromisos”, ha precisado.
Además de destacar la resistencia del pueblo y el Gobierno iraníes, así como la gestión del Líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, Rabiei ha reafirmado que Irán revertirá los pasos tomados para reducir sus compromisos nucleares solo después del fin verificable de embargos de EE.UU.
El titular iraní ha recalcado además que ni en Viena ni en ningún otro lugar habrá diálogo directo o indirecto entre los representantes del país persa y Estados Unidos.
El PIAC vive un destino incierto tras la salida unilateral de EE.UU. La Administración de Trump no escatimó esfuerzos para destruir este logro diplomático mediante su llamada campaña de “máxima presión” destinada a obligar a Teherán a renegociar el pacto.
Después de la retirada de EE.UU. del acuerdo nuclear en mayo de 2018, Irán esperó un año dando oportunidad al resto de los firmantes para salvarlo, pero, ante la pasividad de los firmantes europeos, empezó a reducir gradualmente sus compromisos.
El país persa ha pedido a la troika europea del acuerdo —el Reino Unido, Francia y Alemania— que comparezca de forma “constructiva” en la reunión de Viena y respete sus compromisos con el tratado nuclear.
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