España tiene problemas con el artículo 184 del Tratado de Retirada en el que la Unión Europea (UE) y el Reino Unido deberán negociar de manera expeditiva las condiciones de la nueva relación, sin mencionar la situación particular de Gibraltar. Madrid cree e insiste en que la redacción actual del mencionado artículo pone en cuestión su capacidad para negociar con Londres el futuro de Gibraltar. Y pide garantías para estar presente en todo lo referido al peñón, una vez que se produzca el Brexit.
En un tuit, el jueves, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aseguró que su posición es muy lejana a la del Ejecutivo británico sobre el tema de Gibraltar y, de no haber cambios, vetará el Brexit. Por su parte, la primera ministra británica, Theresa May, insistió hoy en que su Gobierno no ha cambiado ni cambiará su postura sobre la soberanía de Gibraltar, dejando así muy clara su posición.
Aunque hoy el primer ministro de Gibraltar, Fabián Picardo, aseguró haber alcanzado un acuerdo con España sobre el papel en el proceso del Brexit, la Cancillería española ha aclarado que el anuncio no se refiere al tratado, sino a cuatro memorandos y un acuerdo fiscal negociados bilateralmente entre Madrid y Londres que facilitarán una salida más ordenada de la UE por parte del peñón, una vez que el Brexit se produzca.
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