En España, en una semana ya se han cancelado unos 200 vuelos y más de mil presentan retrasos por la huelga de sindicatos Ryanair. Ahora la huelga de tripulantes de cabina de la aerolínea irlandesa se extiende 12 jornadas para presionar a la empresa, a la que exigen la firma de un convenio colectivo basado en la legislación española que mejore las condiciones de sus trabajadores.
Los sindicatos también denuncian que Ryanair está trayendo trabajadores extranjeros en esquirolaje para sustituir a los tripulantes en huelga y realizar los vuelos nacionales.
En Francia la situación es similar. Decenas de vuelos fueron cancelados en el aeropuerto parisino de Charles de Gaulle, donde los bomberos están en huelga desde el jueves, lo que obligó a las autoridades a reducir el número de pistas por prevención.
Los trabajadores de este sector denuncian falta de un incremento salarial en los últimos años, mientras en la vida post-COVID-19, los costos se han incrementado rápidamente. Los huelguistas denuncian la inacción de las autoridades en este sector, que no sienten la inflación por altos salarios que reciben.
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