• Los trabajos de construcción continúan en el sitio del proyecto de la refinería Mehr del Golfo Pérsico cerca de la ciudad sureña de Bandar Abás, Irán.
Publicada: sábado, 20 de mayo de 2023 22:57
Actualizada: sábado, 20 de mayo de 2023 23:25

Una gran refinería de condensado de gas iraní entrará en funcionamiento el próximo año para satisfacer la creciente demanda nacional de gasolina.

La compañía responsable de construir la refinería Mehr del Golfo Pérsico ha informado este sábado sobre el progreso en el proceso de la construcción de esta planta, con la capacidad de procesamiento de unos 120 000 barriles por día (bpd).

Se espera que el lanzamiento de esta refinería agregue 13 millones de litros de gasolina, tres millones de litros de diésel y un millón de litros de queroseno a la capacidad de producción (diaria) del país”, ha explicado.

Según el informe, la refinería Mehr (sol, en español) cubriría una brecha cada vez mayor que ya existe entre la oferta y la demanda de gasolina en Irán, por lo que el país ha reanudado las importaciones después de más de una década.

La ceremonia de inauguración de la construcción de la primera petrorefinería completamente iraní se celebró en septiembre de 2020.

El proyecto se está construyendo cerca de la refinería Estrella del Golfo Pérsico, que tiene la capacidad de producción de 360 000 bpd y funciona con suministros de gas del yacimiento de Pars del Sur, el campo de gas más grande del mundo, ubicado en la frontera marítima entre Irán y Catar en el Golfo Pérsico.

 

Irán produce actualmente casi 105 millones de litros por día de gasolina, unos cinco millones de litros por debajo de la demanda diaria, un récord que se ha informado en los días de mucho trabajo en los últimos meses.

Los precios ultrabajos de la gasolina y el diésel han provocado un gran aumento en el contrabando de combustible a través de las fronteras iraníes en los últimos meses, lo que obligó al país a reanudar sus importaciones limitadas de gasolina de otros países, entre ellos Rusia.

La mayor parte del combustible de contrabando va destinada a los vecinos orientales, como Afganistán y Pakistán, pero también a países litorales del Golfo Pérsico, como los Emiratos Árabes Unidos (EAU).

Irán ha prometido una y otras veces que el Golfo Pérsico nunca será un lugar seguro para los contrabandistas.

msm/rba