Conforme al informe de este lunes de la Comisión independiente de investigación de la ONU sobre el conflicto de Gaza en 2014, “informaciones sustanciales que ponen en evidencia posibles crímenes de guerra” cometidos por parte del régimen de Israel.
En el reporte, la jueza estadounidense Mary McGowan, presidente de la citada comisión, considera que “la amplitud de la destrucción y del sufrimiento humano en Gaza no tuvo precedentes y tendrá un impacto en las futuras generaciones”.
De igual manera, se muestra “preocupada por el uso extensivo de (régimen de) Israel de armas letales en un importante radio” de impacto, para después indicar que esa agresión israelí cobró la vida de 2140 palestinos.
También, critica la “impunidad que prevalece a todos los niveles” de las fuerzas israelíes, lo cual impide llevar ante la justicia a los autores y responsables de la ofensiva israelí efectuada en los meses julio y agosto de 2014.
La elaboración de este informe ha tenido lugar mientras el régimen de Israel rechazó el acceso libre y las investigaciones sobre el terreno de la Comisión, de manera que la recopilación de datos y testimonios se llevaron a cabo por teleconferencia o por teléfono.
Horas después de la publicación de este reporte, el portavoz del ministerio israelí de asuntos exteriores, Emmanuel Nahshon, ha considerado que el informe “estuvo dirigido por una institución notoriamente parcial (y) recibió un mandato abiertamente parcial”.
Por su parte, el primer ministro del régimen de Israel, Benyamin Netanyahu, ha declarado su rechazo y alegó que ese régimen “no comete crímenes de guerra”.
El régimen de Israel, entre el 8 de julio y el 26 de agosto de 2014, perpetró una brutal ofensiva contra la Franja de Gaza. El desastre provocado por las ofensivas israelíes contra Gaza, llevó a la ONU a poner en marcha una investigación en torno a posibles crímenes de guerra cometidos por el régimen israelí contra los residentes del enclave costero.
El Consejo de Derechos Humanos de la ONU aprobó el pasado julio una resolución que además de condenar al régimen de Israel por sus ataques contra la asediada Franja de Gaza, creó una comisión para investigar supuestos crímenes y violaciones del derecho internacional. La resolución fue aprobada por 29 votos, con 17 abstenciones. El único voto en contra fue de Estados Unidos, principal aliado del régimen de Tel Aviv.
Emitida esta resolución, el régimen de Israel anunció que no cooperaría con la ONU en el proceso investigativo de crímenes de guerra en Gaza.
A pesar de que las agresiones israelíes contra Gaza dieron lugar a grandes olas de críticas y condenas en todo el mundo, las autoridades israelíes constantemente amenazan a los palestinos con volver a atacar a Gaza.
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