Taher al-Nunu, uno de los líderes del Movimiento de la Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), ha declarado este miércoles que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, no quería un acuerdo y trató de evadir la implementación de las cláusulas del alto el fuego previsional ya alcanzado, asegurando que él y su gabinete buscaban reanudar la guerra contra la Franja de Gaza.
El funcionario ha resaltado que, al contrario de Israel, HAMAS aceptó el plan del enviado especial del presidente de Estados Unidos para los cautivos israelíes, Adam Buehler, e incluso consideró la propuesta del enviado especial para Asuntos de Asia Occidental, Steve Witkoff.
Al-Nunu ha hecho énfasis en que el régimen de ocupación está buscando sabotear las negociaciones para preservar el gabinete de Netanyahu.
“El enemigo sionista nunca podrá lograr sus objetivos ni devolver a uno solo de sus cautivos sin un acuerdo. Tampoco hay garantías con respecto a los detenidos israelíes, que podrían morir en bombardeos y continuas agresiones”, ha agregado.
Respecto a la postura del Gobierno estadounidense, ha denunciado que la Administración Trump inició su actividad como defensora del régimen ocupante y es su verdadero cómplice en los crímenes que comete, especialmente a través del apoyo político y armamentístico que sigue brindándole.
Las declaraciones de Al-Nunu se producen después de que el régimen israelí reanudara el martes sus ataques contra la Franja de Gaza, poniendo fin a un frágil alto el fuego iniciado el 19 de enero con la mediación de Egipto, Catar y Estados Unidos.
Según el Ministerio de Salud de Gaza, unas 419 personas murieron y más de 500 resultaron heridas durante los nuevos ataques israelíes en el asediado enclave palestino.
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