“La aprobación de este proyecto injerencista por la Cámara Baja del Congreso estadounidense es una medida irracional e inaceptable”, ha subrayado este miércoles el portavoz de la Cancillería, Bahram Qasemi.
El texto estadounidense, aprobado el martes con 415 votos a favor y 2 en contra, sostiene que los actos de sabotaje cometidos en días recientes en Irán son “legítimos y pacíficos” y “condena las violaciones graves de los derechos humanos, la corrupción y las actividades de desestabilización cometidas en el extranjero" por Irán.
El diplomático persa ha precisado que este y otros actos “hostiles” llevados a cabo contra la nación persa tienen su raíz en la “ambición de hegemonía” de los gobernantes estadounidenses, pero ha asegurado también que “no son más que medidas fracasadas”.
“La nación iraní ha sido blanco en las últimas décadas de múltiples resoluciones repetitivas y politizadas que reflejan el injerencismo del régimen estadounidense”, ha recordado el vocero.
Las autoridades estadounidenses deben saber que la nación persa está observando estos actos hostiles y de doble rasero de EE.UU. en su contra, y dará una respuesta adecuada a estas imprudentes medidas si es necesario”, advierte el portavoz del Ministerio iraní de Asuntos Exteriores, Bahram Qasemi.
En su denuncia, Qasemi ha señalado por otra parte la hipocresía de Washington respecto a Irán, ya que por un lado apoya de palabra y con “eslóganes engañosos” a quienes en días recientes se han manifestado contra la política económica del Gobierno iraní, pero por otro castiga al pueblo iraní imponiéndole “sanciones crueles y vetándole la entrada a EE.UU.”.
“Las autoridades estadounidenses deben saber que la nación persa está observando estos actos hostiles y de doble rasero de EE.UU. en su contra, y dará una respuesta adecuada a estas imprudentes medidas si es necesario”, ha advertido el portavoz.
El martes, el Líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, acusó al triángulo formado por Estados Unidos, el régimen israelí y “un rico país del Golfo Pérsico” —en una alusión implícita a Arabia Saudí— de alentar el caos en Irán en los últimos días. Los enemigos de Irán, dijo el ayatolá Jamenei, han intentado durante años atacar el país y la Revolución Islámica, pero han fracasado en sus intentos.
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