El domingo, coincidiendo con el aniversario 78 del bombardeo atómico de Estados Unidos sobre la ciudad nipona de Hiroshima, el ministro de Asuntos Exteriores iraní, Hosein Amir Abdolahian, llegó a Japón.
Al respecto, el portavoz de la Cancillería iraní, Naser Kanani, además de confirmar la visita de Amir Abdolahian a Japón, agregó que fue recibido por funcionarios del país asiático.
Sobre la agenda del máximo diplomático iraní en este viaje, Kanani dijo que se espera que aborde temas de las relaciones bilaterales, asuntos regionales y desarrollos internacionales con altas autoridades japonesas, como el primer ministro, Fumio Kishida; el ministro de Relaciones Exteriores, Yoshimasa Hayashi, y el ministro de Salud, Trabajo y Bienestar, Katsunobu Kato.
En este contexto, el vocero persa escribió en la red social X que “EE.UU. es el único gobierno con una historia oscura de usar armas nucleares como armas de destrucción masiva y ayudar a un régimen ilegítimo con el arsenal nuclear más grande”.
Ya en Tokio, el canciller persa dijo a la prensa que Irán siempre ha tenido una visión positiva del pueblo japonés, la civilización y la historia.
“Dados los desarrollos positivos en curso en Asia Occidental, creemos que Japón puede desempeñar un papel constructivo en la región”, afirmó Amir Abdolahian, cuyo viaje es el primero de un ministro de Relaciones Exteriores iraní a Japón desde diciembre de 2019 y el primero bajo la presidencia de Seyed Ebrahim Raisi.
U.S.A is the only govt. with a dark history of using nukes as a WMD & aiding an illegitimate regime with the largest nuclear arsenal. Is it fit to be the flag bearer of a nuclear weapons ban!? Its’ claims about Iran’s nuclear program are a deliberate repetition of a big lie. pic.twitter.com/wlg5Ozz4qC
— Nasser Kanaani (@IRIMFA_SPOX) August 6, 2023
Entretanto, una delegación del Museo de la Paz de Teherán, que representa a los afectados por armas químicas durante la guerra Irán-Irak de 1980-1988, viajó Japón para expresar su solidaridad con las víctimas de los ataques atómicos de Estados Unidos.
El 6 de agosto de 1945, Estados Unidos borró del mapa Hiroshima, tras atacar esta ciudad con una bomba atómica de gran potencia, acción que repitió tres días después en Nagasaki, forzando la rendición incondicional de Japón y, con ello, el final de la II Guerra Mundial.
Los bombardeos atómicos estadounidenses mataron a casi 300 000 personas en ambas ciudades. Además, miles más murieron más tarde por lesiones y enfermedades relacionadas con la radiación.
Tras los devastadores ataques, el propio EE.UU. confesó que no había necesidad militar de utilizar la bomba, sin embargo, nunca ha pedido hasta el momento perdón a Japón y a las víctimas por esta atrocidad histórica.
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