“Desafortunadamente los esfuerzos y acuerdos internacionales como el Tratado de No Proliferación (TNP) no han logrado eliminar la gran amenaza de las armas nucleares, y todo porque las potencias nucleares hasta ahora no han respetado sus compromisos con el desarme nuclear, además pensamos que tampoco lo van a hacer en el futuro”, ha dicho este martes el representante permanente de Irán ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Qolamali Joshru.
El diplomático persa dijo estas palabras en el discurso ofrecido ante la ONU, donde más de cien países se han congregado para negociar sobre un tratado para prohibir las armas nucleares.
La convocatoria del foro para prohibir las armas nucleares fue aprobada en octubre de 2016 por una comisión de la Asamblea General de la ONU (AGNU), con 123 votos a favor, 38 en contra y 16 abstenciones.
Desafortunadamente los esfuerzos y acuerdos internacionales como el Tratado de No Proliferación (TNP) no han logrado eliminar la gran amenaza de las armas nucleares, y todo porque las potencias nucleares hasta ahora no han respetado sus compromisos con el desarme nuclear, además pensamos que tampoco lo van a hacer en el futuro”, ha lamentado el representante permanente iraní ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) Qolamali Joshru.
La mayoría de los países dicen que, pese a los compromisos de las grandes potencias nucleares en el marco del Tratado de No Proliferación (TNP), en estos últimos años no se han registrado avances en materia de desarme nuclear.
Lo más destacado de este evento ha sido el boicot de unos 40 países, entre ellos, EE.UU., Francia y el Reino Unido.
En este sentido el representante persa ante la ONU ha denunciado que algunas potencias nucleares ignoran abiertamente el deseo de la comunidad mundial de un mundo sin armas nucleares.
Además agrega que Irán, como víctima de las armas de destrucción masiva, conoce muy bien su peligro, y por ello hará todo lo posible en la vía diplomática para poder salvar el ser humano de tal amenaza.
Cabe mencionar que el actual Tratado de No Proliferación Nuclear, firmado en 1968, estipula un compromiso hacia el desarme futuro, pero no prohíbe las armas de esta clase. Este pacto no ha sido suscrito por Israel, régimen que no reconoce su posesión de armas nucleares, ni por Corea del Norte, cuyo desarrollo nuclear es bien conocido.
EE.UU. acusa a los demás países de ser amenazas nucleares y se autodenomina protector de la paz, pero es la única potencia nuclear que ha empleado esta arma devastadora contra otro país. Estados Unidos en 1945 lanzó dos bombas atómicas sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki.
mnz/nii/