El asesor del Líder de la Revolución Islámica de Irán para Asuntos Internacionales, Ali Akbar Velayati, en una carta al secretario general del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), Seyed Hasan Nasralá, le ha congratulado este lunes el 17.º aniversario de “la orgullosa victoria” en la guerra de los 33 Días que emprendió el régimen de Israel en 2006 contra la nación libanesa.
“La victoria en este campo, que se logró a la luz de la fe, la perseverancia, las medidas precisas y la confianza en Dios todopoderoso, es uno de los eventos importantes y decisivos durante todas las batallas del frente de la Resistencia islámica y el régimen terrorista sionista, que con el paso del tiempo, su importancia, logros y valor estratégico se hace más visible”, se lee en la misiva de Velayati.
De igual manera, el alto funcionario iraní ha puesto de relieve que esta guerra ha acabado con el mito de la invencibilidad del armado ejército del régimen israelí, “que hoy se encuentra en una situación mucho peor”.
Sin duda, ha constatado el texto, “los éxitos estratégicos del frente de la Resistencia en los últimos años en la Palestina ocupada, Siria, Irak, Yemen y en toda la región, que ha reducido el umbral de tolerancia de los sionistas a menos de dos días, es la continuación del mismo camino que en la guerra de los 33 Días se abrió contra los ocupantes sionistas”.
Según el asesor del Líder de Irán, “conmemorar este importante acontecimiento en una situación en la que el régimen sionista enfrenta crisis existenciales tanto en el ámbito interno como en la esfera externa y hoy se encuentra en el estado de destrucción, es un mensaje de poder y autoridad para los ocupantes de que el terrorismo, la ocupación y la matanza no son disuasivos, creadores de seguridad y obstáculos al colapso”.
Al final de su carta, Velayati ha rendido homenaje a todos los mártires de la Resistencia, especialmente el teniente general iraní Qasem Soleimani y el mártir de Hezbolá Imad Mughniyeh, quienes desempeñaron un papel destacado en la victoria de la guerra de los 33 Días, y ha deseado el progreso de la nación libanesa.
El 12 de julio de 2006, los israelíes lanzaron extensos ataques contra el territorio libanés por tierra, mar y aire, so pretexto de liberar a dos de sus soldados. No obstante, gracias a la resistencia de Hezbolá, Israel se vio obligado a retirarse con las manos vacías.
Unos 1200 libaneses, en su mayoría civiles, perdieron la vida en la ofensiva israelí, que duró 33 días. El conflicto finalizó el 14 de agosto de ese año tras aprobar el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) la Resolución 1701, que llamaba a los agresores israelíes a respetar la soberanía y la integridad del territorio libanés.
hnb