En su intervención en la reunión de los embajadores de los Estados miembros del Movimiento de los Países No Alineados (MPNA o MNOAL), celebrada en la ciudad suiza de Ginebra al margen de la 57.ª sesión del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (CDHNU) (9 de septiembre al 11 de octubre de 2024), el representante permanente de Irán ante la Oficina de la ONU en Ginebra, Ali Bahreini, ha condenado los crímenes y genocidio diario del régimen israelí en los territorios palestinos ocupados y la extensión de estos crímenes a El Líbano en los últimos días que resultó en el asesinato de Seyed Hasan Nasralá, secretario general del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá).
Bareiní ha considerado los crímenes cometidos por Israel en Gaza como un claro ejemplo del genocidio que se lleva a cabo con el apoyo de los países occidentales, y ha enfatizado que las cifras de los asesinados y heridos en Gaza y El Líbano, que ascienden a más de 42 000 de personas, no son sólo números, sino que se tratan de las vidas honorables que se han perdido por la ocupación, las políticas expansionistas y genocidas del régimen israelí.
En este encuentro, el representante de El Líbano, por su parte, ha precisado que Israel pretende repetir en El Líbano el genocidio que ha llevado a cabo en Gaza en el último año, y ha denunciado que hasta ahora cientos de personas han sido asesinadas y millones de otras han sido desplazadas, recalcando que este número está aumentando y no es posible proporcionar estadísticas precisas de las víctimas de los crímenes del régimen israelí.
En los últimos días, han intensificado los ataques de Israel a El Líbano después de que Israel asesinara al líder de Hezbolá, Seyed Hasan Nasralá, en un ataque llevado a cabo el 27 de septiembre.
Desde el inicio de la ofensiva bélica israelí en la Franja de Gaza hace casi un año, al menos 41 689 palestinos han perdido la vida, la mayoría mujeres y niños, y otros 96 625 han resultado heridos, según el Ministerio de Sanidad de Gaza.
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