“Ninguna fuerza, ni siquiera con el apoyo del mundo entero, puede derrotar al pueblo iraní. Hoy en día, algunas naciones, incluyendo Estados Unidos y ciertos países europeos, creen erróneamente que Irán se ha debilitado y que pueden ejercerle presión. Lo que no comprenden es que el pueblo iraní nunca se someterá a la humillación”, declaró el sábado el mandatario en una ceremonia en Teherán, la capital.
Destacó el papel crucial del pueblo iraní en la gestión de las crisis y el apoyo al Gobierno, agregando que la unidad y la solidaridad pueden ayudar a la nación a superar cualquier obstáculo.
“Aunque fracasemos cien veces, mientras estemos vivos, construiremos nuestro país a través de la unidad interna y las relaciones saludables con nuestros vecinos”, recalcó.
Sus declaraciones se producen en medio de la retórica bélica del inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, contra Irán. El magnate republicano ha amenazado con el uso de la fuerza militar, si Teherán no se sienta a la mesa de negociación sobre un nuevo acuerdo nuclear.
Irán, por su parte, ha rechazado cualquier negociación bajo amenazas y presiones. Las Fuerzas Armadas del país también han dicho estar listas para repeler cualquier agresión y defender a la patria.
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