De campeón de críquet a líder de Paquistán. Esta es la historia de Imran Jan, una exestrella de la selección paquistaní de cricket que ganó las elecciones generales del miércoles al puesto de primer ministro. Sin embargo, Jan, quien comenzó a dedicarse a la política hace 22 años y tiene la lucha contra la corrupción como bandera, no logró una mayoría suficiente por lo que tiene que formar una coalición para gobernar.
Para los observadores de la Unión Europea (UE), las elecciones estuvieron marcadas por la falta de igualdad. Ya que no todos recibieron la misma oportunidad electoral. Mientras, una ONG paquistaní, Red para Elecciones Libres y Justas, que desplegó unos 20 000 observadores, dio una evaluación globalmente favorable.
En su discurso de victoria, Jan adoptó un tono conciliador con sus opositores. Prometió forjar un “nuevo Paquistán” y un “Estado de bienestar islámico”, así como luchar el “cáncer” de la corrupción y la pobreza.
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