El portal de la televisión estatal yemení Al Masirah ha informado este jueves que las fuentes tribales en la provincia de Marib, ubicada en el noreste del país árabe, aseveran que el líder del partido, Abu Abdulá al-Mashdali, quien es uno de los vínculos entre las fuerzas de la coalición y el grupo terrorista Al-Qaeda, ha recibido dicha ayuda.
Las fuentes indican que la coalición agresora pidió a Al-Mashadli que se coordinara con Al-Qaeda para generar nuevos frentes contra las fuerzas del Ejército y los comités populares en varios distritos de la provincia de Al-Bayda, en el centro de Yemen.
Agregan que el acuerdo entre la coalición en Marib y el líder de la mencionada facción salafista se añade a los intentos que realiza la coalición por preparar a los terroristas de Al-Qaeda en el distrito de Lawder de la provincia de Abyan (suroeste).
Los terroristas están listos para lanzar ataques armados contra las posiciones del Ejército y los comités populares en la región de Mukayris, sita en Al-Bayda, en los próximos días con el fin de reducir la velocidad de su avance hacia la ciudad de Marib.
El 30 de marzo, Al-Qaeda abrió un nuevo frente en el distrito de Al-Sawmah, en Al-Bayda, con apoyo aéreo y significativo suministro logístico de las fuerzas de la coalición, pero las fuerzas del Ejército yemení lograron poner fin a los enfrentamientos a su favor y tomar el control de la situación.
Al-Qaeda había llamado a sus partidarios a principios de marzo para luchar junto con los combatientes de la coalición para evitar que las Fuerzas Armadas ingresaran a Marib.
Anteriormente, el Gobierno de Salvación Nacional de Yemen había advertido sobre la presencia de las agrupaciones takfiríes Al-Qaeda, Daesh y los salafistas en Marib, donde, según dijo, están luchando, junto a mercenarios saudíes, emiratíes y estadounidenses, contra el Ejército yemení.
En los últimos meses, Marib se ha convertido en el escenario de feroces choques entre el Ejército de Yemen y los mercenarios al servicio de la llamada coalición liderada por Arabia Saudí que, desde marzo de 2015, lleva a cabo una campaña sin cuartel de agresiones contra el país más pobre del mundo árabe.
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