El representante sudafricano Ebrahim Rasool fue catalogado como persona “non grata” por la Casa Blanca, tras fustigar el supremacismo demostrado por las políticas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
En reacción, la oficina del presidente sudafricano Cyril Ramaphosa exhortó este sábado a todos los involucrados a “mantener el decoro diplomático” en este asunto y reiteró su compromiso de “construir una relación mutuamente beneficiosa” con Estados Unidos, y después de las discrepancias públicas con Trump de las semanas recientes.
Rasool declaró en un seminario que el inquilino de la Casa Blanca “promueve un ataque contra quienes ostentan el poder al movilizar el supremacismo en su contra”, mientras ponía en duda el apoyo del magnate Elon Musk a agrupaciones radicales en otras naciones.
La declaración de persona “non grata” al diplomático sudafricano fue hecha el viernes por el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, durante una declaración pública en redes sociales, cuando Rubio acusó a Rasool de incitar al racismo y odiar a EE.UU. y al presidente.
Desde finales de febrero, Cyril Ramaphosa, jefe de Estado de Sudáfrica, declaró que busca llegar a un acuerdo con su homólogo estadounidense para solucionar la tensión entre ambas naciones, y que su meta a largo plazo es visitar a Washington para fortalecer sus relaciones bilaterales.
Antes de tales afirmaciones de Ramaphosa, Donald Trump ya había prometido cortar la ayuda a Sudáfrica, en un contexto de crecientes tensiones entre ambos países debido a la presentación por la nación sudafricana de una demanda contra Israel por el genocidio en Gaza ante la Corte Internacional de Justicia.
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