En una misiva dirigida al ministro de Relaciones Exteriores de Bolivia, Diego Pary, el Representante permanente de Bolivia ante la OEA, José Alberto Gonzales, ha renunciado este martes de manera irrevocable a su cargo.
“Mediante la presente presento mi renuncia irrevocable al cargo de Representante Permanente del Estado Plurinacional de Bolivia ante la OEA. Sin otro particular, saludo a usted muy atentamente”, reza el documento entregado al canciller Pary.
De esta manera, Gonzales se une a la extensa lista de funcionarios bolivianos que han renunciado desde el domingo, después de la dimisión de Evo Morales al cargo de la Presidencia de la República.
El diplomático, que sucedió en el cargo al actual canciller boliviano, Diego Pary, destacó la integridad de los comicios del 20 de octubre en una reunión del Consejo Permanente que se celebró el 23 de octubre.
Mediante la presente presento mi renuncia irrevocable al cargo de Representante Permanente del Estado Plurinacional de Bolivia ante la OEA. Sin otro particular, saludo a usted muy atentamente”, reza el documento entregado por el representante permanente de Bolivia ante la OEA, José Alberto Gonzales, al canciller boliviano, Diego Pary.
Gonzales ocupaba el cargo desde el 21 de septiembre de 2018, tras haber cumplido funciones como presidente del Senado de la Asamblea Legislativa Plurinacional. Fue asambleísta por el Movimiento Al Socialismo (MAS).
La nueva deserción se registra a pocas horas de la renuncia de Javier Zavaleta, exministro de Defensa, quien aseguró que mientras fue responsable, nunca ordenó el uso de la fuerza militar contra la población. En total, más de 30 funcionarios han renunciado debido a la crisis política y social que atraviesa el país andino.
Evo Morales, primer presidente indígena de Bolivia, renunció el domingo a la Presidencia para “preservar la paz en su país”, tras un golpe de Estado dirigido por la oposición. Esta no reconoció su reelección en los comicios del pasado 20 de octubre y llevó la violencia a las calles.
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Diferentes países, como Rusia, Cuba, Venezuela, Nicaragua y Uruguay, han condenado el golpe de Estado en Bolivia. El Gobierno mexicano ha otorgado asilo político a Morales, que partió el lunes hacia el país azteca, aunque aseguró que “regresará con más fuerza y energía”.
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