Fitch es la tercera calificadora internacional en menos de dos meses en rebajar la nota de calidad crediticia a Costa Rica, Moody’s y Standard & Poor’s ya lo habían hecho en el mes de diciembre a pocos días de la aprobación de la reforma fiscal, la baja en la calificación de Fitch es de dos puntos a B+, en su argumentación las tres hacen referencia a los altos niveles de riegos de impago y las altas tasas de ínteres derivadas de los déficit fiscales descontrolados y la creciente deuda.
Con la aprobación de una ley en el Congreso el gobierno pretende colocar 6000 millones de dólares en eurobonos en los próximos seis años, una solución que sigue sin atacar los problemas fundamentales del déficit y que ahora deberá enfrentar mayores costos con una reforma fiscal que las mismas calificadoras catalogan de insuficiente.
Sumado a la baja de la calificación crediticia del país el gobierno deberá enfrentar también la aplicación de un plan para la reactivación económica que espera este año superar el 3 % proyectado para este 2019.
Mauricio Inostroza, San José.
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