• Un atentado terrorista llevado a cabo con motos en Cali, Colombia, 10 de junio de 2025.
Publicada: miércoles, 11 de junio de 2025 2:15

Colombia ha vivido una jornada marcada por una oleada de violencia, tras el atentado contra el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay.

Mientras Colombia aún no se reponía del impacto por el atentado contra el precandidato Miguel Uribe Turbay, los ataques terroristas en la ciudad de Cali, sudoeste de Bogotá (capital colombiana) intensificaron el martes su desafío al Estado colombiano, encabezado por Gustavo Petro.

En la región de Cali operan disidentes de la extinta guerrilla FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia), que mantienen un conflicto abierto contra el gobierno del presidente Gustavo Petro. El general Carlos Triana, director de la Policía Nacional, señaló que los ataques indiscriminados se registraron principalmente en los departamentos de Valle del Cauca y Cauca. Entre tanto, ni el grupo insurgente ni el Gobierno han emitido declaraciones oficiales respecto a las escenas de violencia mortal sucedidas en las últimas horas. 

Vehículos bomba (autos, buses y motocicletas), cilindros explosivos, francotiradores y drones se mezclaron en 19 atentados para provocar la muerte de al menos cinco civiles y tres policías, además de decenas de heridos, incluidos dos menores.

Según medios locales, al menos ocho de los heridos se encuentran en estado crítico.

Uno de los epicentros del ataque fue la ciudad de Cali, donde Petro había convocado para el miércoles a sus seguidores en defensa del decreto para forzar una consulta popular sobre su reforma laboral. 

Además, otras zonas del Valle del Cauca y Cauca fueron elegidas por los guerrilleros para vengar la muerte de uno de sus líderes, alias Mayimbú, abatido en 2022.

Precisamente en las horas previas, la también precandidata presidencial Vicky Dávila había señalado a Iván Mordisco, líder de las disidencias de las FARC como el principal inductor del atentado contra el senador Uribe Turbay.

También, la inteligencia militar de Colombia determinó que los responsables de los actos terroristas son las estructuras residuales de las disidencias de las FARC, más específicamente desde las estructuras Jaime Martínez, Carlos Patiño y Dagoberto Ramos.

Crímenes de lesa de humanidad

En este contexto, el ministro de Defensa colombiano, Pedro Arnulfo Sánchez, tildó de un “crimen de lesa humanidad” los ataques terroristas cometidos en Colombia.

Sánchez destacó que el “único objetivo” de ese grupo armado es “generar terror, desestabilizar el orden institucional y afectar grave y principalmente a la población civil, para poder seguir viviendo del narcotráfico y minería ilegal”.