Se tensa todavía más la situación en la península coreana, después de que Pyongyang confirmara un exitoso ensayo de una bomba nuclear. Ante tal escenario, los mandatarios de Rusia y China, Vladimir Putin y Xi Jinping, respectivamente, han llamado a todas las partes involucradas en el asunto que eviten el caos y manifiesten discreción.
Durante una reunión mantenida este domingo en el marco de la Cumbre del grupo de los BRICS (Brasil, Rusia, La India, China y Sudáfrica) ambos líderes han acordado asimismo manejar de manera apropiada la prueba nuclear de Pyongyang, insistiendo en “soluciones diplomáticas” para solventar la crisis en la península de Corea, según ha informado el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
Putin y Xi han coincidido en "la inadmisibilidad de la nuclearización de la península de Corea", apostilla el vocero ruso, subrayando que ambos presidentes han observado que existe una "coordinación de acciones en el ámbito internacional entre Rusia y China, incluido sobre el asunto norcoreano".
Después de reunirse con el mandatario chino, Putin habló por teléfono con el primer ministro japonés, Shinzo Abe. A este respecto, Peskov, ha indicado que durante la conversación ambos dignatarios coincidían en que las pruebas nucleares de Pyongyang violan “el derecho internacional y suponen una amenaza”.
No obstante, según agrega el portavoz, "Putin llamó a no ceder” y “a ser prudentes”, y dijo que “solo son posibles las soluciones políticas y diplomáticas”.
Al ser preguntado sobre una posible reunión entre Putin y el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, ha indicado que "por el momento" el mandatario ruso no lo tiene planeado.
El ensayo nuclear de Corea del Norte ha generado un aluvión de rechazos y condenas a nivel internacional. Corea del Norte, a su vez, ha asegurado en múltiples veces que sus ensayos tienen carácter disuasivo y defienden su “derecho a la autodefensa” ante las “intenciones hostiles” de EE.UU. y sus aliados en la región (Tokio y Seúl).
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