Según reportó el miércoles la cadena estadounidense CNN, citando a funcionarios de la Casa Blanca, el exmandatario republicano, minutos antes de la transición del mando presidencial, emitió una directiva a fin de extender la protección del Servicio Secreto a 13 miembros de su familia después del fin de su mandato.
No obstante, dicho memorando es contario a lo estipulado por la ley, según la cual, la protección del Servicio Secreto solo se aplica al presidente y su esposa e hijos menores después de abandonar la Casa Blanca, en este caso a Trump, su esposa y su hijo menor, Barron, de 14 años.
Asimismo, el exvicepresidente Mike Pence y su esposa, Karen, recibirán seguridad continua durante los próximos seis meses bajo la misma ley de protección.
De acuerdo con la ley en cuestión, el exmandatario puede recibir la protección “durante toda su vida”, mientras su hijo Barron solo hasta que cumpla 16 años. Los otros miembros de la familia ya no están autorizados a tener la protección, pero gracias a la orden del magnate republicano, la agencia federal protegerá a toda su familia durante los próximos seis meses.
Si bien un presidente tiene la autoridad de ordenar la protección del Servicio Secreto para quien quiera, es extraño que lo haga para un gran número de sus familiares, en especial cuando la mayoría son adultos.
Trump tampoco desperdició el último día de su mandato para cerrar una larga lista de indultos, incluidos a su antiguo estratega político Steve Bannon, un exrecaudador de fondos y dos conocidos raperos.
El magnate republicano abandonó la Casa Blanca —tras muchos esfuerzos por quedarse en el poder y probar un fraude electoral— sin hacerse presencia en la ceremonia de investitura de su descendiente, el demócrata Joe Biden, quien prestó juramento el miércoles como el 46.º mandatario de EE.UU.
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