Los indignados piden respuesta a las autoridades ante un crimen que ocurrió en esas instalaciones y que ha conmocionado la ciudad, en la boca de todos, hay un nombre: Jordan Neely.
Es noticia en Estados Unidos una reciente grabación en la que se vieron los últimos momentos de vida de Jordan Neely, un hombre afroamericano, de 30 años, con problemas mentales, que se dedicaba a imitar a Michael Jackson, en el metro.
El lunes pasado, Jordan entró en un tren, gritando, desesperadamente, a los pasajeros que era hambriento y que no tenía nada que comer. Fue, entonces, cuando un exmarino, identificado como Daniel Penny, lo estranguló hasta matarlo. El exmarino fue detenido por las autoridades, pero después fue puesto en libertad.
Este hombre fue asesinado. Lo sostuvieron con una llave de estrangulamiento en un tren público, mientras la gente observaba y grababa video.
Para los residentes de la ciudad, Jordan murió, porque era pobre, y sobre todo, porque era negro.
Lo que ha aumentado la furia de los manifestantes, es el elogio que le hacen al agresor los medios de la ultraderecha en Estados Unidos. Para su defensa, Daniel Penny, ha contratado a un abogado defensor de las políticas del expresidente Donald Trump.
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