El 28 de diciembre, el periódico estadounidense afirmó en un artículo que combatientes del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) supuestamente cometieron violencia de género contra mujeres israelíes tras la operación Tormenta de Al-Aqsa, ejecutada contra la entidad sionista el 7 de octubre.
Al respecto, los familiares de una de las supuestas víctimas de esos vejámenes han denunciado que los periodistas manipularon la historia publicada.
Los autores del informe afirmaron que habían elaborado el artículo con base en más de 150 entrevistas realizadas a presuntas víctimas o sus familias, pero repitieron testimonios del 7 de octubre que ya habían sido publicados y desacreditados previamente.
Un tercio del informe estaba dedicado a los Abdush, una familia judía mizrají de clase trabajadora que perdió a su hija Gal, conocida como “la mujer del vestido negro”, quien supuestamente fue violada durante la operación de HAMAS.
Un día después de la publicación del informe, el sitio de noticias israelí Ynet llevó a cabo una entrevista con los padres de Gal, quienes enfatizaron que no existen pruebas de que haya sido violada, y que los reporteros los entrevistaron con falsos pretextos, al afirmar que desconocían el tema de la presunta agresión sexual hasta que salió publicado el artículo.
HAMAS ha rechazado enérgicamente las acusaciones de violaciones y agresiones sexuales formuladas por la entidad sionista contra sus combatientes, al subrayar que el régimen de Tel Aviv “se esfuerza por demonizar a la Resistencia con historias inventadas”.
“Rechazamos las mentiras israelíes sobre las violaciones, que pretenden distorsionar la Resistencia y empañar nuestro trato humano y moral a los cautivos”, indicó el Movimiento en un comunicado a principios de diciembre.
Israel libró una guerra genocida contra la Franja de Gaza como represalia por el fracaso sufrido durante la operación especial Tormenta de Al-Aqsa, efectuada por HAMAS en respuesta a las atrocidades del régimen sionista contra el pueblo palestino.
Desde el inicio de los indiscriminados bombardeos y la ofensiva terrestre del ejército israelí contra Gaza, han muerto más de 22 300 palestinos, en su mayoría mujeres y niños, mientras más de 57 000 personas resultaron heridas.
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