“Estoy profundamente entristecido por la muerte de Riham Daubasha en víspera de su cumpleaños número 27”, explicó el lunes el Coordinador Especial de la ONU para el Proceso de Paz en el Oriente Medio, Nikolay Mladenov.
“Estoy profundamente entristecido por la muerte de Riham Daubasha en víspera de su cumpleaños número 27”, explicó el lunes el Coordinador Especial de la ONU para el Proceso de Paz en el Oriente Medio, Nikolay Mladenov.
“Riham es la tercera víctima fatal de un ataque con bombas incendiarias perpetrado el 31 de julio pasado por colonos israelíes contra la vivienda de su familia en la Villa Duma, en Cisjordania, que mató a su marido y su hijo menor, e hirió a su hijo de cuatro años de edad, Ahmad”, lamentó Mladenov en un comunicado.
El titular de la ONU afirmó que “la tragedia de esa familia es un ejemplo impactante de la naturaleza destructiva del extremismo”, y demostró su solidaridad con Ahmad “ahora huérfano debido a este acto atroz”.
“¿Cómo podemos decirle que murieron su padre, madre y hermano?”, cuestionó Mladenov, para después calificar de imprescindible la necesidad de que los líderes políticos, religiosos y comunitarios denunciaran estos actos y que actuaran de forma decisiva contra los que incitan al odio de ambas partes.
En tanto, Mladenov llamó a la justicia y denunció “el lento avance en la identificación y juicio de los responsables”, pese a la amplia condena internacional que recibió esta masacre de colonos extremistas israelíes.
“Los continuos fracasos para abordar eficazmente la impunidad de los repetidos actos de violencia de los colonos han llevado a otro terrible incidente que involucra la muerte de una vida inocente. Esto debe terminar”, denunció.
El pasado domingo, la cadena 10 de la televisión israelí informó de la muerte a causa de las heridas sufridas de la madre del bebé palestino quemado vivo en un ataque incendiario de los colonos israelíes .
En la noche del pasado 30 de julio, un grupo de colonos israelíes atacó con cócteles molotov una casa palestina en la localidad de Kafr Duma, en la ciudad cisjordana de Nablus. En este ataque murió quemado vivo un bebé de 18 meses llamado Ali Saad Daubasha.
Días después, el padre del niño, Saad, murió en el hospital de Soroka, donde había sido tratado por las quemaduras que sufrió en el 80 por ciento de su cuerpo.
Actualmente, el único sobreviviente de esta familia es Ahmad, el hijo de 4 años, quien sigue bajo tratamiento en un hospital israelí por quemaduras graves. Amjad Dawabsheh, un familiar, dijo el lunes a la radio del ejército israelí que los familiares no le han dicho al niño lo que ha pasado a su familia.
No obstante, hasta la fecha, las autoridades israelíes no han anunciado arrestos ni identificado sospechosos por el ataque de julio; y se ha prohibido publicar detalles de las investigaciones al respecto.
tas/rha/kaa