El representante de Irán ante la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ), Alireza Yahanguiri, advirtió el martes en la 21ª sesión de la conferencia del organismo en La Haya (Holanda), sobre el uso masivo de armas químicas por grupos terroristas como EIIL (Daesh, en árabe) y el Frente Fath al-Sham (antiguamente conocido como Frente Al-Nusra), en Irak y Siria.
“Los Estados patrocinadores de estos grupos que facilitan a los terroristas el acceso a sustancias químicas deberían responsabilizarse por sus acciones”, subrayó el diplomático persa.
Los Estados patrocinadores de estos grupos que facilitan a los terroristas el acceso a sustancias químicas deberían responsabilizarse por sus acciones”, subrayó el representante de Irán ante la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ), Alireza Yahanguiri.
Yahanguiri elogió al Gobierno sirio por cumplir con las obligaciones definidas dentro del marco de la Convención sobre las Armas Químicas (CAQ), desde que se adhirió a ella en 2013, y pidió un trato “no discriminatorio” con el expediente del país árabe ante la OPAQ.
Lamentó la parcialidad de las Naciones Unidas y la OPAQ a la hora de presentar informes “unilaterales” mediante su Mecanismo Conjunto de Investigación (MCI) sobre armas químicas en Siria, sin que hagan referencia alguna a las informaciones provistas por el Ejecutivo sirio.
En otro momento de sus declaraciones, el diplomático persa destacó el pleno compromiso de la República Islámica con la CAQ y recordó que el país persa rechaza la producción, almacenamiento y el uso de todo tipo de armas de destrucción masiva debido a sus creencias religiosas y un decreto religioso (fatwa) de su Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei.
El diplomático concluyó su discurso, pidiendo una mayor presión internacional al régimen de Israel para que se adhiera “sin demora y precondiciones” a la CAQ.
Israel, que impide la supervisión de los inspectores de las entidades internacionales de sus instalaciones químicas, es considero por muchos Estados de la región, como la mayor amenaza tanto química como nuclear en Oriente Medio.
Existen numerosas denuncias por funcionarios palestinos del Ministerio de Salud sobre el uso de sustancias tóxicas y armas no convencionales por Israel en sus ataques contra la Franja de Gaza, incluida en la agresión que llevó a cabo en verano de 2014.
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