“Felicitamos al pueblo resistente de Gaza y Palestina por esta victoria. Se enfrentaron a Israel con fuerza y dignidad, y alcanzaron este gran logro”, ha dicho este lunes el jefe del Ejecutivo, Masud Pezeshkian, durante una reunión en Teherán, un día después de que un acuerdo de alto el fuego entre Israel y HAMAS entrase en vigor tras más de 15 meses de la guerra en la Franja de Gaza.
El acuerdo se logró después de que el régimen se rindiera ante las incesantes y exitosas operaciones de los grupos de Resistencia palestinos en el asediado enclave.
“Este pueblo resistente enseñó a otras naciones cómo deben enfrentarse al terrorismo”, ha agregado el mandatario persa, considerando la matanza de casi 47 000 palestinos, en su mayoría mujeres y niños, durante la reciente guerra en Gaza como “un ejemplo de terrorismo”.
Ha cuestionado que el régimen sionista y sus aliados, encabezados por Estados Unidos, responsables de innumerables actos terroristas y del genocidio en Gaza, acusen a la República Islámica de “apoyar el terrorismo”.
Irán es víctima del terrorismo
El presidente ha identificado a la nación iraní como “víctimas del terrorismo”, señalando cómo los enemigos han asesinado a numerosos iraníes, incluidos funcionarios, grandes personalidades y élites, desde la victoria de la Revolución Islámica [1979] del país como un medio para tratar de desestabilizar y debilitar la República Islámica.
En este sentido, ha expresado sus más profundas condolencias por el asesinato de dos jueces de la Corte Suprema del país, diciendo: “El martirio de estos seres queridos sirve como razón y testimonio de que la República Islámica de Irán y esta Revolución son víctimas del terrorismo”.
Ha dicho que los “enemigos suponen que pueden incapacitar” a la República Islámica con asesinatos y actos de terrorismo, agregando que la unidad entre el pueblo y el Gobierno fracasará todos los complots de adversarios contra el país.
Los jueces, identificados como Ali Razini, jefe de la Sección 39 de la Corte Suprema, y Mohamad Moqiseh, jefe de la Sección 53, fueron asesinados en un ataque terrorista en el edificio de la Corte Suprema en el centro de Teherán, la capital iraní.
Los jueces trabajaron en casos de lucha contra delitos contra la seguridad nacional, espionaje y terrorismo.
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