“Recientemente, hemos recibido una propuesta por parte de Estados Unidos, a la cual daremos nuestra respuesta adecuada en los próximos días. Esta respuesta se formulará sobre la base de los principios fundamentales de la República Islámica de Irán y en línea con los intereses del pueblo iraní”, señaló Seyed Abás Araqchi en una entrevista con la cadena egipcia Al-Nile durante su visita a El Cairo el 1 de junio.
Tras cinco rondas de negociaciones indirectas con Irán, mediadas por Omán, Estados Unidos presentó recientemente una propuesta para conseguir un acuerdo sobre el programa nuclear iraní, la cual rechazaba el programa de enriquecimiento de uranio.
El borrador ha recibido fuertes rechazos y críticas en Teherán, porque el enriquecimiento es considerado como la columna vertebral del programa nuclear iraní y una de las principales líneas rojas del país en las negociaciones. Las autoridades iraníes han dejado claro que el país continuará enriqueciendo con o sin acuerdo.
El jefe de la Diplomacia persa agregó que, tras presentar la respuesta iraní, el ministro de Exteriores de Omán, Badr bin Hamad al-Busaidi quien funge de mediador en las discusiones, determinará la fecha y el lugar de la próxima ronda de las pláticas.
Irán no busca dotarse de armas nucleares
Araqchi aprovechó la entrevista para recalcar una vez más que el país persa no tiene intención de adquirir armas nucleares, enfatizando que esta postura se basa en principios religiosos y en la fatwa (decreto religioso) del Líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, que prohibió la producción, el almacenamiento y el uso de armas de destrucción masiva.
“No deseamos obtener armas nucleares, ya que este asunto está arraigado en nuestras creencias. Esto se remonta a la fatwa del Líder […], quien declaró haram [prohibida] la posesión de tales armas. Y dado que somos una nación religiosa, nos es imposible desviarnos de esta fatwa”, precisó.
Irán está listo a restablecer la confianza sobre su programa nuclear
Señaló que Teherán continúa dialogando y negociando sobre cuestiones nucleares para demostrar el carácter pacífico de su programa nuclear. “Y si hay preguntas o inquietudes, estamos dispuestos a abordarlas mediante el fomento de la confianza”, afirmó.
El ministro de Exteriores reiteró el compromiso de Teherán con seguir buscando la diplomacia. “Irán sigue siendo capaz de demostrar su buena voluntad y está dispuesto a tomar medidas para restablecer la confianza”.
Según Araqchi, un acuerdo sobre el programa nuclear iraní “invalidará una de las principales alegaciones planteadas por el régimen sionista”. “Somos plenamente conscientes de que el régimen sionista posee docenas de ojivas nucleares, pero acusa a Irán de buscar armas nucleares. Sin embargo, nuestra postura es clara: nuestro programa nuclear es pacífico y no representa una amenaza para ninguna parte ni país”, detalló.
Hizo hincapié en que, contrario a Israel que tiene un programa nuclear militarizado, el programa nuclear iraní es “científico, conforme al derecho internacional y con fines exclusivamente pacíficos”.
Israel es la principal raíz de la inseguridad en Asia Occidental
Araqchi abordó además los acontecimientos en el mar Rojo, y vinculó los sucesos con la dinámica regional. “Lo que está sucediendo en el mar Rojo es, de hecho, el apoyo del pueblo yemení a Gaza”, afirmó, haciendo referencia a los ataques con drones y misiles de Yemen a barcos vinculados a Israel en el mar Rojo.
Consideró al régimen israelí como “la causa fundamental de todos los problemas en la región”, y añadió: “Lo que estamos presenciando en el mar Rojo es una de las muchas consecuencias de los crímenes que este régimen comete contra el pueblo palestino”.
Las operaciones de Yemen en el mar Rojo se llevan a cabo en solidaridad con el pueblo palestino en la Franja de Gaza, que sufre una guerra genocida por parte de Israel desde octubre de 2023.
Irán, determinado a fomentar lazos sólidos con los vecinos
En otra parte de la entrevista, Araqchi reafirmó además la determinación de Irán de fomentar relaciones sólidas y constructivas con los países vecinos y de la región, en particular con los Estados árabes.
Denunció los intentos del régimen sionista de “presentar a Irán como una amenaza regional” con el objetivo de fomentar división entre los vecinos. “De hecho, es el régimen sionista el que representa una verdadera amenaza para toda la región”, añadió.
Al describir a los países árabes como “amigos y vecinos” y, más importante aún, como “hermanos musulmanes”, Araqchi dijo que la política exterior de la actual Administración iraní está firmemente arraigada en el principio de buena vecindad y en el fortalecimiento de la cooperación regional.
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