“Es un espectro amplio que trasciende las fronteras de Bolivia donde está en juego la supremacía estadounidense y de sus aliados en la región”, así ha definido el analista en temas políticos Juan Alberto Sánchez Marín los acontecimientos en Bolivia, tras la renuncia del presidente legítimo Evo Morales y la instalación de un gobierno de facto, autoproclamado por Jeanine Áñez.
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HispanTV se ha contactado este viernes con Sánchez para abordar la reciente decisión del gobierno de Áñez de expulsar a los diplomáticos venezolanos del país andino. Al respecto, el experto ha afirmado que Venezuela, por su orientación política, es un obstáculo muy grande para toda la región y para llevar a cabo el alineamiento de la derecha regional y el modelo capitalista que trata de implementarse.
De hecho, ha indicado Sánchez, Gobiernos como los de Perú, Colombia, Chile y Paraguay y de otros aliados de Washington, ven al Gobierno de Venezuela, presidido por Nicolás Maduro, como una amenaza para su “democracia de papel y su estabilidad de mentira”.
Sin embargo, el analista ha destacado que la Administración de Maduro supone una amenaza mayor para un gobierno como el de Áñez, que “es ilegal a todas luces”.
Es un espectro amplio que trasciende las fronteras de Bolivia donde está en juego la supremacía estadounidense y de sus aliados en la región”, así ha definido el analista en temas políticos Juan Alberto Sánchez Marín los acontecimientos en Bolivia.
Sánchez también ha señalado que la persecución y el terror que está implementando el nuevo gobierno ponen de relieve que “saben que su poder que ha sido usurpado carece de validez, es indefectible desde la legalidad”.
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Asimismo, ha dicho que “no queda duda que el gobierno de facto está cumpliendo una hoja de ruta dictada desde Washington”, en la que el primer paso de acción es “barrer con todo lo que queda del Gobierno legal de Morales” para garantizar el triunfo de las “elecciones de parodia” que va a convocar Áñez y, el segundo, será el cambio de la Constitución.
Este viernes, el gobierno de Áñez ha informado de la salida de Bolivia de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) y del cese de al menos el 80 % de embajadores designados por el expresidente Morales.
A modo de colofón, el analista ha previsto que “lo que viene no es fácil para la resistencia de un pueblo con una larga historia de lucha, pero tampoco será fácil para ese poder usurpado”.
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Fuente: HispanTV Noticias
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