El martes, la Casa Blanca anunció la emisión de una orden ejecutiva para impedir que todos aquellos migrantes que crucen la frontera sur de manera ilegal puedan recibir asilo, a fin de facilitar las expulsiones de quienes no están amparados legalmente para quedarse y reducir el trabajo de las autoridades fronterizas. Además, Estados Unidos comenzará “lo antes posible” a deportar a aquellos inmigrantes ilegales que supongan una amenaza para la seguridad nacional y la seguridad pública.
De inmediato, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) expresó estar “muy preocupada” por las nuevas medidas de asilo “que imponen duras restricciones al derecho de solicitar asilo en el país” e instó a la Administración de Joe Biden que cumpla con sus obligaciones internacionales y no menoscabe “el derecho fundamental a solicitar asilo”.
“Solo quiero recordarles que la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y nuestra posición también es que en todas las situaciones reiteramos que la búsqueda de asilo es un derecho humano fundamental, y el acceso al asilo para aquellos que lo necesitan es primordial”, manifestó la portavoz asociada del secretario general de la ONU, Florencia Soto Niño.
I'm deeply disappointed by President Biden's executive order gutting asylum laws. This will be one of the most restrictive border policies in modern history.
— Rep. Ilhan Omar (@Ilhan) June 4, 2024
We condemned Trump for this; we must call out Biden too. pic.twitter.com/vxwHLlMgjX
AI: Biden usa medida migratorias xenófobas de Trump
Por su parte, la organización pro derechos humanos Amnistía Internacional (AI) denunció que la orden ejecutiva de Biden para restringir el asilo “sientan un peligroso precedente internacional” y son “absolutamente vergonzosas para un país que alguna vez ayudó a redactar la Convención sobre los Refugiados”.
“Esta acción ejecutiva juega con narrativas falsas sobre invasiones en la frontera y promueve una política basada en ideas supremacistas blancas a expensas de las personas que buscan seguridad en Estados Unidos”, criticó la directora de refugiados y derechos de los migrantes de AI en Estados Unidos, Amy Fischer.
Equiparó asimismo estas medidas de Biden con las utilizadas por la Administración de Donald Trump “para implementar las peligrosas y xenófobas prohibiciones de viaje a musulmanes y africanos”.
En efecto, Trump usó en 2017 la autoridad ejecutiva para prohibir la entrada a Estados Unidos de personas procedentes de países mayoritariamente musulmanes y también para prohibir la entrada a la mayoría de los solicitantes de asilo en 2018.
Biden recurre ahora a la misma orden ejecutiva que revocó cuando llegó al poder, tal como lo prometió en su campaña. A la luz de las elecciones presidenciales de noviembre en Estados Unidos, además de frenar el flujo de solicitantes de asilo, la acción de Biden podría tener el efecto político de recortar la ventaja de Trump en el tema de la inmigración.
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