“Apoyamos firmemente su derecho a determinar su propio futuro y, si así lo eligen, les damos la bienvenida a los Estados Unidos de América”, declaró Trump el martes aproximadamente a la mitad de su discurso de 90 minutos.
También prometió a los groenlandeses que Estados Unidos “los mantendrá a salvo, los haremos ricos y juntos llevaremos a Groenlandia a alturas que nunca antes creyeron posibles”.
Al respecto, enfatizó que realmente lo necesita para la seguridad internacional y la seguridad global y cree que lo conseguirá.
Asimismo, dejó claro que, si la persuasión fallaba, no se rendirá. “Lo conseguiremos de una forma u otra”, aseguró el magnate republicano.
Durante su primer mandato presidencial, Trump ya habló sobre la posibilidad de comprar Groenlandia, la isla más grande del mundo perteneciente a Dinamarca, pero con amplios derechos de autonomía.
Estados Unidos considera que la posesión y el control de Groenlandia es una necesidad absoluta, para los objetivos en seguridad nacional y libertad en todo el mundo.
Los funcionarios daneses han rechazado firmemente las propuestas anteriores de Trump sobre la compra del territorio autónomo.
Groenlandia, la isla más grande del mundo, obtuvo la autonomía de Dinamarca en 1979. Su territorio es rico en petróleo y minerales. Este vasto territorio ártico también alberga la base militar estadounidense de Pituffik y la infraestructura de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
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