• Los iraníes enfatizan que EEUU y Occidente no son de fiar
Publicada: lunes, 6 de mayo de 2019 23:08
Actualizada: lunes, 6 de mayo de 2019 23:34

Transcurrido casi un año de la salida unilateral de EE.UU. del acuerdo nuclear, la Casa Blanca sigue endureciendo las sanciones y presiones contra el país persa.

El 8 de mayo de 2018, las cámaras registraron otra muestra de la violación de los acuerdos internacionales por parte del presidente estadounidense, Donald Trump. Sacó unilateralmente a su país del acuerdo nuclear firmado en 2015 tras meses de conversaciones entre Irán y el Grupo 5+1 (entonces formado por EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania).

La salida estuvo acompañada de duras sanciones y presiones estadounidenses, actuaciones que contravienen lo estipulado en el pacto. Europa tampoco adoptó medidas prácticas y se limitó a manifestar su apoyo en comunicados y declaraciones.

Los bloqueos a las transacciones financieras, a las importaciones de materias primas y a las exportaciones del crudo iraní, son parte de las sanciones que impuso la Administración Trump.

Mientras Irán cumplió plenamente con lo prescrito en el acuerdo nuclear, de acuerdo con los informes de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), el canciller Mohamad Yavad Zarif subraya que los europeos han acatado menos de 1 % de sus obligaciones, una prueba más de que el Occidente no es de fiar, por lo que el pueblo iraní espera que las autoridades tomen medidas al respecto.

Para el pueblo iraní, tras un año de suma paciencia, es necesario que Irán adopte medidas compensatorias y sea precavido para no caer en la trampa de los estadounidenses.

Las evidencias ponen de relieve que EE.UU., además de imponer presiones económicas y renovar las sanciones, ha desatado una amplia guerra psicológica para materializar sus intereses en suroeste de Asia y configurar ecuaciones de poder en una región sumamente sensible, en la cual se halla Irán.

Samaneh Kachui, Teherán.

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