La empresa del brasileño Marcelo Odebrecht hizo negocios millonarios en varios países de América Latina con base en la corrupción de altos funcionarios, presidentes entre ellos.
En México obtuvo contratos que, según investigaciones oficiales y periodísticas, podrían llegar a los 4000 millones de dólares. Algunos de ellos, están en manos de las autoridades por sospechas fundadas de actos ilegales.
Sobre el exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex) Emilio Lozoya Austin y su familia, pesan órdenes de aprehensión por adquirir con ese dinero propiedades de gran lujo en México.
El exdirector de Pemex movió dinero en paraísos fiscales que materializó en la adquisición de dos inmuebles en la Ciudad de México (capital) y Guerrero. Pesan otros delitos en su contra.
La corrupción de la empresa brasileña había alcanzado al exdirector de la paraestatal petrolera mexicana desde 2012 pero que permanecía sin avances en los archivos de la exprocuraduría General de la República. El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), dijo que esto se acabó.
Además de Lozoya Austin, hay cuatro órdenes de aprehensión, entre ellas, contra su esposa, mamá y hermana.
Odebrecht aún tiene contratos vigentes en México, en especial en el estado de Veracruz. Se tiene que investigar el origen de ellos y hasta dónde llegó la corrupción. Hay sospecha incluso hasta del expresidente Enrique Peña Nieto, porque muchos de ellos fueron por asignación directa.
Arturo Calvillo, Ciudad de México.
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