Según la agencia de noticias palestina WAFA, las fuerzas especiales israelíes han irrumpido este miércoles por la mañana en el campo de refugiados de Ein Beit el-Ma, cerca de la ciudad de Nablus, en el norte de Cisjordania ocupada, y han abierto fuego contra un vehículo que se encontraba dentro del campo.
Durante esta incursión, un joven palestino identificado como Uday Adel al-Qatouni, que estaba cerca del lugar, recibió un disparo mortal.
Según las fuentes, poco después estallaron enfrentamientos en el campamento, en los que resultaron heridos tres ciudadanos. Uno de ellos recibió un impacto de bala real en el abdomen.
Las fuerzas israelíes irrumpieron en varias viviendas y desplegaron francotiradores en sus tejados antes de iniciar una campaña de búsqueda, durante la cual arrestaron a varias personas.
En el marco de esta agresión, los soldados israelíes también ingresaron en los campamentos de Balata, Askar al-Qadim y Askar al-Yadid, al este de Nablus, donde destruyeron varias casas, las registraron y saquearon sus contenidos. Además, arrestaron a varios residentes locales en dichos campamentos.
Desde enero pasado, tras la entrada en vigor del alto el fuego entre el Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (HAMAS) e Israel, la entidad sionista ha intensificado sus ataques contra los palestinos en la Cisjordania ocupada.
Esta masiva agresión ha desplazado, hasta la fecha, al menos a 40.000 palestinos en apenas unas semanas, la gran mayoría de ellos provenientes de campos de refugiados en la Cisjordania ocupada.
En la primera quincena de marzo, la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) advirtió que las incursiones israelíes en la Cisjordania ocupada han provocado el “mayor desplazamiento de la población” palestina desde la guerra de 1967.
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