Desde Irán, las autoridades del país persa condenan de manera categórica las atrocidades y la barbarie de la ocupación israelí.
El ministro iraní de Exteriores, Seyed Abás Araqchi, precisó que el asesinato del secretario general del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano, Seyed Hasan Nasralá, fortalecerá aún más a Hezbolá y la sangre de los mártires del incidente de Beirut no quedará sin respuesta.
El presidente del Parlamento de Irán, Mohamad Baqer Qalibaf, denunció que el régimen israelí, al no lograr sus objetivos en el campo de batalla y sufrir numerosas derrotas, ha adoptado el método de terror para sobrevivir y evitar su decadencia. Subrayó que el asesinato de líderes y comandantes libaneses no puede afectar la estructura arraigada de Hezbolá.
A su vez, el ministro del interior de la República Islámica declaró que las agresiones israelíes contra el Líbano muestran su total desesperación y sus consecuentes fracasaos y derrotas ante la eje de la resistencia.
Teherán asevera que se quedará al lado de Hezbolá hasta la liberación completa de Al-Quds y Palestina Ocupada. Deja claro que tarde o temprano el criminal régimen terrorista de Israel recibirá un castigo justo por sus crímenes tanto contra los palestinos como otros movimientos de la resistencia en la zona.
El vicepresidente iraní de asuntos estratégicos, Mohamad Yavad Zarif, ha resaltado que el asesinato “cobarde” de Nilforushan es una “muestra de la naturaleza terrorista y criminal del régimen sionista y de sus conocidos partidarios”. El titular persa ha expresado su sentido pésame por el martirio del general de brigada Abás Nilforushan, en un bombardeo israelí contra una zona civil en el sur de Beirut el viernes.
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